Panamá acaba de dar un paso decisivo en la regulación del cannabis medicinal. El pasado 4 de abril se publicó en la Gaceta Oficial el Decreto Ejecutivo No. 6, que reglamenta finalmente la Ley 242 de octubre de 2021 y da vía libre a la implementación del Programa Nacional para el Estudio y Uso Medicinal del Cannabis y sus Derivados (PNEUCAM).
Aunque la ley había sido aprobada hace más de tres años, el nulo acceso a productos cannábicos con fines terapéuticos generaba frustración entre pacientes, profesionales de la salud y organizaciones civiles. Ahora, con el decreto reglamentario en vigor, se establecen por fin los mecanismos concretos para la producción, importación, comercialización, prescripción y uso de cannabis medicinal en el país.
El nuevo reglamento regula desde la solicitud de licencias hasta el control de calidad, pasando por la trazabilidad del producto, la capacitación médica y los canales de distribución. Entre los aspectos clave, se establece que solo podrán acceder a los productos los pacientes inscritos en el programa nacional y con prescripción médica autorizada. Las formas permitidas de consumo incluyen aceites, gotas, cápsulas y otras preparaciones. En cambio, el uso recreativo y el consumo de flores secas fumadas quedan expresamente prohibidos.
Asimismo, el decreto fija los requisitos para las empresas interesadas en operar dentro del esquema regulado: contar con instalaciones seguras, sistemas de cultivo y procesamiento certificados, personal capacitado y autorización expresa del Ministerio de Salud. También se contemplan sanciones por incumplimiento y mecanismos de fiscalización para garantizar la legalidad y eficacia del sistema.
La publicación del decreto ocurre en paralelo a iniciativas ciudadanas como la de la plataforma CanaDoctors, que recientemente lanzó una campaña para reunir apoyos digitales y visibilizar la urgencia de implementar el acceso real al cannabis medicinal. Su propuesta incluye guiar a los pacientes en el proceso legal, informar sobre patologías tratables y promover una red de profesionales de salud capacitados.
Panamá se suma así a la lista de países latinoamericanos que han regulado el uso terapéutico del cannabis, siguiendo el camino de naciones como Colombia, Uruguay o Argentina y la entrada en vigor del Decreto Ejecutivo No. 6 podría marcar un punto de inflexión en la garantía del derecho a la salud para cientos de pacientes que esperaban esta medida desde 2021.