Hace años, en Reino Unido se pueden acceder a diferentes productos medicinales derivados del cannabis. Pero estos fármacos y cremas no eran producidos en el país. Por el contrario, son importados. Pero la balanza ha empezado a equilibrarse, ya que días atrás, por primera vez en el país comenzaron a venderse aceites que fueron elaborados en el país desde el cultivo.
La primera clínica que comercializará los primeros aceites medicinales “hecho en Reino Unido” será Releaf, quien distribuirá los productos elaborados por la compañía Glass Pharms. “Al ofrecer medicamentos a base de cannabis sostenibles y cultivados localmente, no solo satisfacemos una importante necesidad insatisfecha en la industria de la salud y mejoramos el acceso de los pacientes, sino que también reducimos nuestro impacto ambiental y apoyamos a la industria nacional”, dijo Tim Kirby, director general de Releaf.
Las intenciones de abastecer al mercado interno por parte de Glass Pharms fueron conocidas a principios de año, cuando le dijo al medio Business of Cannabis que esto se trataba de su objetivo corporativo principal y “resolver los problemas de faltantes” de los productos medicinales del cannabis en el país. “Creemos que si se reemplaza esa cadena de suministro y los pacientes tienen la experiencia de poder recibir un medicamento confiable, repetible y estandarizado que funciona, eso elimina una de las piezas clave de fricción de la propia industria”, dijo Kirby, según el medio británico Cannabis Health News.
Reino Unido es uno de los principales importadores de fármacos derivados del cannabis en todo el mundo. Ahora, tendrá un producto elaborado completamente en el país. Para ello, la compañía Glass Pharms se asoció con una pareja de productores de plantas, quienes aseguran lograr cosechas de interior cada cuatro meses.