La versatilidad del cáñamo va más allá de aceites, textiles o plantas aromáticas, su impacto puede llegar a mejorar la salud del planeta. De hecho, la producción de cáñamo descontamina el suelo, siendo su tiempo medio de cultivo de tres a cuatro meses, por lo que consumirá menos aguas y pesticidas para crecer. ¡El impacto ambiental se reduce considerablemente!
El impacto en la huella de carbono se reduce gracias a la aplicación del cáñamo. Con éste podemos sustituir los tradicionales bloques de hormigón de la industria de la construcción por unos resistentes, ligeros y sostenibles hechos de cáñamo. El hempcrete es un hormigón que se obtiene mezclando las fibras de estopa rica en celulosa del cáñamo con cal y agua. Su uso se ha generalizado en Francia e Inglaterra, siendo sus ventajas su capacidad para regular la humedad, sostener los muros de carga y su gran poder de aislamiento.
Pero no solo su aplicación sostenible sirve para reemplazar al hormigón, sino que las semillas y fibras de cáñamo se pueden emplear para generar plástico, combustibles, cuerdas, alimentos, medicinas y un largo etcétera, todo ello salvaguardando el medioambiente.
Una única hectárea de cáñamo puede llegar a producir tanta fibra utilizable como cuatro hectáreas de árboles. Además, el cáñamo se podría cosechar cada 100 días, mientras que los árboles precisan de décadas para estar listos. El papel que produce el cáñamo es más resistente y reciclable que el generado por la madera.
Sus aportaciones al medioambiente
Como ves, las aportaciones del cáñamo son múltiples y variadas, no es de extrañar que compañías como Mama Kana y otras similares también se dediquen a sacar el máximo partido a esta planta. Pero sigamos viendo sus muchas virtudes.
Las siembras de cáñamo se convierten en un recurso más ecológico que los propios árboles para transformar el dióxido de carbono en oxígeno. ¿Sabías que con solo una cuarta parte de cáñamo podría suplantarse la labor de una hectárea de árboles? ¿Quieres saber más?
El valor del CO2
Las zonas forestales consiguen acumular toneladas de carbono por hectárea al año y transformarlo en oxígeno, reduciendo el nivel global de dióxido de carbono de la atmósfera, y por ende, el efecto invernadero que deriva en el cambio climático.
La deforestación cada vez es más común por desgracia, ocasionando el aumento de la temperatura global en las últimas décadas y del CO2, que ha pasado de niveles del 12% al 20%. La plantación de cáñamo es una solución beneficiosa para el medioambiente.
Reducción del calentamiento global
A raíz de la idea anterior, hay que destacar que el cáñamo crece rápidamente y absorbe el CO2 para convertirlo en compuestos orgánicos, liberando oxígeno. De este modo, podría ser que llegase a absorber más de 5,3 kilogramos de CO2 por hectárea.
Reconstrucción de la tierra
El cáñamo beneficia a la regeneración de los suelos en más del 65%, influyendo en los nutrientes. Actúa como un bioacumulador, es decir, que absorbe y recoge sustancias del suelo y elimina la contaminación próxima al suelo y el agua, evitando la erosión de la zona.
La rotación de los cultivos es una práctica muy generalizada en la agricultura, siendo el cáñamo ideal debido a que su tiempo de crecimiento es bajo y se puede plantar entre otras cosechas para mejorar la calidad del suelo.
Otro de los beneficios medioambientales del cáñamo es que contribuye a la fitorremediación, es decir, en el uso de la plantación para eliminar el exceso de selenio del suelo y limpiar el ecosistema.
Previene de enfermedades y plagas
Al cosechar cáñamo industrial estaremos eliminado el uso de controladores químicos y pesticidas que son esenciales para la plantación de algodón o soja. Su carácter beneficioso para el medioambiente se debe a que es resistente a hongos, insectos y otras enfermedades. Si se frena el cambio climático se conseguirá garantizar la seguridad alimentaria.
Conserva el uso del agua
Otras de las aportaciones beneficiosas del cáñamo para el medioambiente es que es un cultivo que consume menos agua que otras plantaciones como el algodón, que tiene un 57% de exposición al estrés hídrico. De igual manera, el cáñamo necesita menos tierra para crecer y puede florecer en climas y suelos muy diferentes.
Reducción del uso de combustibles fósiles
El cáñamo industrial es una fuente natural de biodiesel, ya que es un combustible elaborado mediante materia vegetal. Además crece en suelos pobres y no resta espacio a las tierras destinadas a los cultivos alimentarios.
Cambia el concepto de los plásticos
Los plásticos de cáñamo son livianos, duraderos y biodegradables, favoreciendo al sistema endocrino humano y a la sostenibilidad medioambiental.
Con los avances científicos vamos descubriendo diariamente la amplia variedad de usos que tiene el cáñamo para beneficiar al día a día del hombre y para solventar los problemas del ecosistema. Hablar del cáñamo es hacerlo de uno de los recursos sostenibles que lideran la lucha contra el cambio climático y en pro de la protección medioambiental.