Naama Issachar, de 25 años, fue perdonada por el presidente Ruso Vladimir Putin. Pone así fin a una injusta condena de 7.5 años por tráfico de marihuana.
La mujer, con doble nacionalidad estadounidense y israelita, fue detenida en Rusia después de que la policía encontrase que llevaba 9 gramos de cannabis escondidos en su bolsa de viaje. Venía de Nueva Delhi mientras iba a Tel Aviv. Tuvo que hacer parada para cambiar de avión en Rusia y ahí es donde acabó el periplo.
Desde el primer momento se pensó que este acoso a Naama Issachar estuvo orquestado como represalia por la detención de Aleskey Burkov, un técnico de computadoras que fue detenido en Israel a petición de la Interpol. Rusia trató de realizar un cambio de cromos pero ya era demasiado tarde y Burkov estaba siendo extraditado a los EE.UU. El asunto llegó tan lejos que incluso tuvo que intervenir el presidente de Israel Benjamin Netanyahu.
Issachar reconoció que lo que llevaba en la bolsa era cannabis pero negó que fuese para traficar. No debió importar mucho porque las autoridades rusas le aplicarlo la ley como si se tratase de cocaína en lugar de marihuana. Por lo general, una cantidad de 9 gramos de cannabis puede llevarte a la cárcel como mucho un par de meses… a esta chica la colaron casi ocho años.
Netanyahu, que dijo cuando fue detenida Issachar que “apreciaría la buena voluntad del presidente Putin que le dedicase a este caso y espero que acabe en buen puerto”, ahora dice sobre el asunto: “agradezco a mi amigo el presidente Putin que haya garantizado el perdón a Naama Issachar ”. Según las autoridades rusas, Issachar ha sido liberada por “motivos humanitarios”.