Los flavonoides, al igual que los terpenos, son los elemento bioactivos que producen cómo percibimos una determinada planta. En el cannabis también los encontramos.

A estos flavonoides del cannabis se les conoce como cannaflavina. Al igual que cualquier otro flavonoide estos elementos son los que luego llegan a nuestra nariz o al paladar y hacen que se activen generando tal o cual olor y sabor.

Los flavonoides están por toda la naturaleza y se conocen aproximadamente uso 6.000. Entre otras cosas son los causantes del color de la pigmentación de muchas frutas. Estos flavonoides además ayudan a proteger a la planta contra las plagas o los rayos ultravioletas.

Pese a que el sabor y olor característico de una variedad de cannabis está ligado a sus terpenos los flavonoides también colaboran. Además la pigmentación de la planta tiene mucho que ver con este componente: por ejemplo, el color morado de algunas variedades es debido a los flavonoides.

La cannaflavina de tipo A es farmacológicamente activa contra las inflamaciones. Tampoco os esforcéis en buscarla aislada (¿qué sentido tiene eso?) porque, por lo general, lo vais a encontrar en casi cualquier variedad. Las formas B y C de cannaflavina parece que tienen también alguna propiedad medicinal pero no ha estudios suficientes al respecto.