Las recientes investigaciones policiales en los EE.UU sobre la extraña enfermedad (mortal en algunos casos) y que se relaciona con el vapeo señala a un nuevo responsable: los cartuchos ilegales de marihuana potente.
En la jerga, estos cartuchos cargados con marihuana potente para el vapeo se les conoce como “dank vapes”. A la marihuana potente se le conoce como dank desde hace bastante tiempo, pero parece que el nombre se lo ha apropiado este tipo de cartuchos.
El THC obtenido por canales ilegales y que se utiliza en estos cartuchos parece estar detrás del VAPI (vaping associated pulmonary injury, lesión pulmonar asociada al vapeo, el nombre es real, no nos lo hemos inventado).
Se está señalando este tipo de cartuchos ilegales porque parece ser que han encontrado bastantes casos en el hospital que reportan haber utilizado dank. No queda claro de si se trata del cartucho en sí o del producto que se comprar para rellenar ese tipo de cartucho. De hecho, la mayor parte de estos productos pueden comprarse vía china: tanto el cartucho como el material para rellenarlo.
Entonces, ¿ya no se trata de culpar al acetato de vitamina E, que se pensó que podría ser el primer responsable de todo esto? Pues no se sabe aún. Es cierto que este tipo de producto (el dank) no está controlado y pudiera tener algo que ver pero al igual que con el acetato aún estamos en la oscuridad. Puede que sí, puede que no.
Sea como sea, la paranoia por descubrir qué está pasando ha sacado a la luz el mercado negro de cartuchos de THC ilegal que carece de toda regulación. Este pasado mes la policía de Wisconsin incautó unos 77.000 cartuchos de THC empaquetados en cajas de dank.