El suceso ocurrió en el mes de junio, y el joven (o su organización) debió pensar que era buena idea simular el transporte de cadáveres en ataúdes para pasar desapercibidos delante de la policía en plena crisis sanitaria provocada por la covid-19.
Brasil ha sido el segundo país con más muertes producidas por la pandemia, por lo que un coche fúnebre con ataúdes no debía resultar especialmente llamativo. Sin embargo, según ha publicado el Daily Mail el joven fue detenido por conducir de forma irregular, y a pesar de relatar que transportaba dos cuerpos desde Ponta Porã, una ciudad en el estado de Mato Grosso do Sul, cerca de la frontera con Paraguay, no pudo demostrar con ningún documento su versión. La falta de documentación y el nerviosismo del joven alertó a los policías, que acabaron por sospechar del contenido de los ataúdes.
Los agentes acabaron por solicitar la apertura de los ataúdes y tras abrirlos descubrieron un cargamento de marihuana empaquetada. Más tarde el joven confesó que había recibido 950 dólares por transportar el cargamento hasta la ciudad de Goiania, en el estado de Goiás. La policía detuvo al acusado, que podría enfrentarse a una pena de 15 años si resulta condenado.