Por el momento solo se ha reportado una, pero la intención de Anna es colocar estas máquinas automatizadas para la venta de cannabis en todos los dispensarios que puedan.
Lo interesante de estas máquinas es que son prácticamente tiendas dentro de la tienda: pueden disponer de hasta 2.000 productos en catálogo y venden no solo variedades para fumar sino que uno puede comprar vapeadores, comida infundida, bebidas o cremas. Las máquinas son ideales para el comprador que sabe lo que quiere y no desea esperar en filas potencialmente largas, dice la compañía.
El momento de llegada de esta empresa a las tiendas no puede ser mejor pues con la pandemia de la Covid-19 la cantidad de personas por establecimiento se ha limitado, así que poder acceder al producto desde fuera del edificio o similar, como si se tratara de un cajero automático, es una solución bastante adecuada para el cliente. Las expendedoras no son una novedad, pero sí el modelo de negocio que está planteando Anna con este tipo de maquinaria específica.
Durante la primera mitad de 2020, los dispensarios de cannabis de Colorado vendieron 978 millones de dólares en flores de marihuana, comestibles y productos concentrados, casi un 20% más que en el año pasado.