La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se dirigió este lunes a los jóvenes con un discurso en contra del uso de drogas y de los procesos de regulación y despenalización del cannabis que se están produciendo con numerosas declaraciones carentes de fundamento. Durante su discurso, Ayuso presentó una nueva campaña de la comunidad autónoma contra las drogas, que únicamente durará dos semanas y cuyo contenido se limita al título, “No a las drogas” y a una imagen terrorífica (en carteles y en vídeo) que representa una mano demoníaca que amenaza con agarrar a un joven.
La campaña se ha limitado a utilizar un lema que tiene casi cuatro décadas de antigüedad y que en el pasado no ha logrado ningún resultado. El “No a las drogas” escogido por la administración de la comunidad obvia que el alcohol y el tabaco también son drogas y mete en un mismo saco a todas las sustancias ilegales, contribuyendo a la confusión y a la falta de información útil, impidiendo que las personas tomen decisiones informadas para proteger su salud.
En lugar de informar a los jóvenes de los riesgos reales del consumo de cannabis, la campaña se limita a sugerir que el consumo de un porro conduce a una situación terrorífica de enganche en la que lo único que se comunica es terror y oscuridad, y no se explica nada. Cualquier persona, joven o mayor, que haya consumido alguna vez cannabis fumado no podrá dar por creíble la campaña y eso puede llevar a que quienes usan la sustancia, especialmente los jóvenes que se inician en su consumo, subestimen los riesgos reales del cannabis.
En su discurso, Ayuso realizó varias declaraciones que carecen de fundamento o son directamente falsas. La más disparatada de todas es, quizás, cuando dijo que las cientos de miles de muertes ocurridas en EE UU por sobredosis de fentanilo se han producido en mayor medida en los lugares donde se permite el uso de cannabis. No existen datos que apoyen tal afirmación, pero además los estudios que han comparado ambos fenómenos sugieren una relación contraria. Se ha identificado que los estados de EE UU con una regulación del cannabis registran un menor uso de fármacos opioides como el fentanilo, y varios investigadores han propuesto que el cannabis puede funcionar como una vía para reducir el consumo de drogas con mayores efectos negativos.
No a las drogas. pic.twitter.com/tSUaCNMUAh
— Isabel Díaz Ayuso (@IdiazAyuso) October 24, 2022