Una investigación de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional acabó con la detención de 30 personas entre las que se encuentra toda la Unidad de Estupefacientes de la policía de Mérida y dos guardias civiles externos. Asuntos Internos cree que los agentes llevaban años colaborando con redes dedicadas al narcotráfico y están acusados de varios delitos relacionados con la producción de drogas y la omisión de perseguir delitos.
Los agentes detenidos son seis de la Policía Nacional de Mérida que constituían la Brigada de Estupefacientes de la comisaría de Mérida, incluyendo al inspector al frente, así como los dos guardias civiles. Durante la operación se han desmantelado cuatro plantaciones de cannabis de interior con más de 3000 plantas y se ha intervenido numerosos materiales para el cultivo y diversos vehículos.
Según los detalles de la investigación de Asuntos Internos publicados en El Mundo, los agentes detenidos no sólo apoyaban a organizaciones dedicadas al cultivo y producción de drogas para que no fueran descubiertas por la policía, sino que también se dedicaban ellos mismos al cultivo de cannabis en locales y viviendas de su propiedad ubicados en Mérida.
Cuatro de los policías detenidos entraron el viernes en prisión provisional sin fianza y otros dos quedaron en libertad con cargos, mientras que los dos guardias civiles implicados (uno de La Garrovilla, Badajoz, y otro de Torrevieja, Alicante) también han sido metidos en prisión preventiva. Los investigados se enfrentan a delitos de cohecho, encubrimiento, organización criminal, revelación de secretos, infidelidad en la custodia de documentos, tráfico de influencias y omisión del deber de perseguir delitos. La operación, que está bajo secreto de sumario, continúa abierta.