La Justicia de Santa Cruz de Tenerife ha absuelto de tráfico de drogas a dos directivos de un club de cannabis de Tenerife y a los que la Fiscalía pedía dos años de cárcel a cada uno y el pago de cuatro mil euros. El tribunal considero que los acusados no cometían ninguna actividad ilegal y que el establecimiento cumplía los requisitos estipulados para las asociaciones civiles.
En el momento que se realizó el allanamiento en el Club Social de Cannabis, las fuerzas policiales incautaron todo el material vegetal que se encontraba presente en la sede. Pero la Justicia falló que las flores tenían el destino de consumo privado dentro del local y no se comprobó que la asociación tuviera un ánimo de lucro ni que se dedicara a vender marihuana a personas que no estuviesen asociadas. De hecho, se ha demostrado que solo podían ingresar al recinto aquellos que fueran miembros.
Cada miembro disponía de una caja con llave personal para guardar el cannabis que no consumiera el día que asistió. Tampoco se pudo probar que cobraran cada vez que recibían flores, ya que los miembros debían hacer una donación al mes que oscilaba entre los 10 y 30 euros.
El Club Social de Cannabis está registrado desde agosto de 2018, cuando uno de los procesados presentó la documentación en la Dirección General de Relaciones Institucionales, Participación Ciudadana y Juventud de la Consejería de Presidencia del Gobierno de Canarias, donde se presentó como asociación sin ánimo de lucro.
Entre sus fines estaba "crear un espacio de acceso exclusivo para nuestros asociados, situándose a un mínimo de 150 metros de cualquier centro educativo, edificios administrativos y carácter público. Se indicó que se tendría un aforo limitado y acorde con el número de miembros, que sumaban 110, todos mayores de 21 años y usuarios habituales de esta sustancia.