El beneficio por impuestos que se recaudó en el estado de California por la venta de marihuana se coloca en un nivel atómico: casi 1 millón de dólares por día.
Para apreciar cómo el negocio es bastante rentable para el estado, entre abril y junio de este año se recaudó la nada despreciable cifra de 74 millones de dólares en impuestos. Si el negocio sigue en aumento, cosa que parecer correcta pese a haber algunos constipados en el mercado canadiense que auguran una recesión, el estado de California podría ingresar 1.000 millones al año solo en impuestos. Eso asegura los analistas del gobierno californiano.
Los impuestos que uno debe pagar al comprar un producto relacionado con el cannabis es del 15%. Se tasa la marihuana (recreativa o medicinal) así como los comestibles o cualquier dispositivo relacionado con el uso del cannabis. Los gobiernos locales pueden añadir más impuestos pero nunca quitarlos. Llama la atención que un país tan liberal como los Estados Unidos metan unos impuestos de aúpa a los productos.
Pese a que las previsiones de venta durante este año se han quedado cortas, aún así, estamos hablando de que el año fiscal que se cerró en 2019 contabilizó 317 millones en venta, 29 millones por encima de lo que se pensaba que se iba a vender. Los datos deben revisarse en cualquier caso y pueden estar sujetos a cambio.
317 millones en un año supone casi 1 millón por día en impuestos.
Se espera que para 2024 que el mercado legal venda 7.200 millones en marihuana. De esa cantidad el 15% (mínimo) irá al fisco de California, que no es moco de pavo.