La cantidad de entidades bancarias que ofrecen sus servicios a los negocios de cannabis legal en EE UU ha aumentado ligeramente, según datos federales recientemente publicados. La prestación de servicios bancarios a los negocios del sector cannábico es un tema peliagudo en EE UU debido a que el cannabis sigue siendo ilegal a nivel federal en el país y los bancos no se acaban de fiar de una legislación poco clara.
Según Marijuana Moment, en 2014 se publicó una guía de la Oficina de Control de Delitos Financieros destinada a ayudar a las entidades bancarias a navegar por el sistema de legalidad actual. Pero los legisladores llevan varios años tratando de aprobar una ley que blinde las operaciones bancarias para los negocios del cannabis de forma efectiva. La Ley de Banca Segura y Justa (SAFE, por sus siglas en inglés) ha sido aprobada en seis ocasiones por la Cámara de Representantes (la última en febrero), pero todavía no ha conseguido superar su paso por el Senado.
Los datos federales recién publicados indican que, a día 30 de septiembre de 2021, había 755 bancos y cooperativas de crédito que habían presentado informes afirmando ofrecer servicios activos a negocios cannábicos. Es una cantidad sensiblemente mayor que la registrada en el trimestre anterior (706), y supone una recuperación tras la caída experimentada en 2020.
Aunque el cannabis es completamente legal en muchos estados de EE UU, la falta de una regulación federal sobre todo el territorio del país provoca que los bancos del país se nieguen a prestar sus servicios al sector cannábico por miedo a sufrir reprimendas legales bajo la ley federal. Es por esto que mientras no se estabilice la situación legal, los negocios en ocasiones se ven obligados a trabajar en efectivo o a buscar artimañas legales y tecnológicas para poder eludir la situación.