La industria legal del cannabis de California, en EEUU, enfrenta una crisis sin precedentes después de que se detectaran varios derivados de la planta que contenían pesticidas, mientras los laboratorios encargados de los análisis habían asegurado que no poseían ningún tipo de residuos. El ente regulador del estado ya ha emitido la orden para que se retiren varias decenas de productos del mercado.
El hecho se destapó después de una investigación periodística realizada en conjunto por Los Ángeles Times y WeedWeek, publicado días atrás, en donde se informó que varias decenas de los productos de cannabis en California contenían residuos de pesticidas. Varios de ellos superaban los umbrales establecidos por la Agencia de Protección Ambiental de EEUU para una sola exposición. Esto implica un grave riesgo para la salud de los consumidores. Pero también esto ha significado un escándalo en la industria, ya que los laboratorios encargados de realizar los análisis de los productos antes de ponerlos a la venta habían dado su visto bueno al respecto. Esta situación hizo que varias tiendas minoristas se encarguen por sí mismas de realizar los estudios de certificación.
Según el Departamento de Control de Cannabis de California, la gran mayoría de los productos retirados del mercado se trataron de cartuchos para vaporizadores que fueron elaborados por la compañía West Coast Cure, una de las marcas más vendidas en los dispensarios californianos. También se han quitado de la venta comestibles y bebidas.
Por último, las compañías Anresco Laboratories e Infinite Chemical Analysis Labs presentaron una demanda contra otros 13 laboratorios de pruebas, donde los acusaron de ignorar la presencia de ciertos contaminantes en los certificados de análisis.