El fiscal jefe de la Asociación Italiana de Árbitros (AIA), Rosario D'Onofrio, fue detenido hace unos días junto a otras 41 personas por supuestamente haber participado en actividades de tráfico de drogas. En la investigación, llevada a cabo por la Dirección Distrital Antimafia (DDA) y la Guardia de Finanza de Milán, también han participado autoridades policiales de España y Países Bajos. El fiscal de la asociación de árbitros, cuyo cometido era investigar las posibles irregularidades de los árbitros, renunció a su cargo tras la detención.
Según la investigación policial, los detenidos estaban implicados en la introducción de droga en varias zonas de Italia, especialmente en la región de Lombardía, en donde introdujeron más de seis toneladas de hachís y marihuana entre 2019 y 2021. Además de las detenciones, la operación se ha cerrado con la incautación de casi media tonelada de cannabis y unas mil recargas de cigarrillos electrónicos con base de cannabinoides.
El ex jefe fiscal de la Asociación de Árbitros ocupaba un puesto de mensajero dentro de la organización de narcotráfico, y también se encargaba de organizar la recepción de droga y de dinero. Según los detalles publicados por As, D'Onofrio había sido militar en el pasado, y utilizó su uniforme para pasar desapercibido durante varios meses de la pandemia en 2020 y poder realizar las entregas de droga.
“Estoy sorprendido. Inmediatamente pedí al presidente de la AIA que me informara de cómo se había seleccionado al fiscal jefe, ya que su nombramiento es responsabilidad exclusiva del comité nacional a propuesta del presidente de la AIA. Una cosa es segura, la federación tomará todas las decisiones necesarias para proteger la reputación del mundo del fútbol y del arbitraje”, expresó el presidente de la Federación Italiana de Fútbol, Gabriele Gravina, tras saber de la detención.
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— A.I.A. (@AIA_it) November 12, 2022