Donald Trump alaba a Rodrigo Duterte
Donald Trump busca apoyos en Asia contra Corea y China. Rodrigo Duterte es la pieza que quiere conquistar alabando su criminal política anti-droga.
El presidente de los EE.UU. anda de gira por el mundo en busca de apoyos contra los que considera sus dos grandes enemigos, Corea del Norte y China. Después de vender más de 1.000 millones en armas a Arabia Saudi (uno de los países que más terroristas de Al Qaeda ha exportado al mundo) ahora busca el guiño cómplice con el mayor criminal del Pacifico, Rodrigo Duterte.
En una llamada de teléfono que realizó el mes pasado, y que ahora aparece transcrita, Donald Trump le dijo a Duterte que “está haciendo un trabajo increíble con el problema de las drogas”. También hizo referencia al anterior presidente Barack Obama, al que Duterte llamo “hijo de puta” como dando a saber al filipino que Obama no supo entender sus criminales políticas.
Recordemos que la política de Duterte contra las drogas es el asesinato de drogadictos y camellos, la mayor parte de estos de manera extrajudicial. El contador de muertos varia considerablemente pero se habla ya de 9.000 muertes desde que entró al gobierno.
La transcripción la sacaron a la luz el gobierno filipino y la administración Trump ha confirmado que es correcta.
"Quiero felicitarle porque estoy escuchando sobre el increíble trabajo ante el problema de la droga", le dice Trump a Duterte. "Muchos países tienen el problema, nosotros tenemos un problema, pero qué gran trabajo está haciendo, quería llamarle para decírselo", agregó. Entonces para Trump un gran trabajo es asesinar de forma indiscriminada a los consumidores, permitir que la gente mate a su vecino si sospecha que se droga o tener al cargo del estado grupos paramilitares y asesinos siempre el terror en las calles.
La administración Obama denunció cómo Filipinas estaba haciendo caso omiso a los Derechos Humanos en su intento de erradicar la “lacra de la droga” tal y como dice Duterte. Esto llevo a llamar “hijo de puta” a Obama. De hecho Duterte tiende a llamar “hijo de puta” a todo el mundo. ¿Tal vez haya que aplicarle a él este calificativo tal y como nos enseña esta canción?
Duterte tampoco es fan de Corea del Norte. El movimiento de Duterte no es tan descabellado desde el punto de vista de su supervivencia como político. Sabe que lo que hace en su país, típico de una dictadura, necesita que sea validado por una gran potencia. Así que ha elegido a Corea del Norte como rival porque tanto EE.UU. como China no están muy contentos con el gobierno de Pyongyang. A su vez tanto China como EE.UU. quiere tener influencia en los países del Pacífico y Filipinas no es mal sitio para plantar bases. Duterte, en lugar de luchar por el amor de esos países lo que quiere es lo justo contrario, dejarse querer a ver cuál de las dos potencias se queda con el pastel de su isla.
“Cuídate Rodrigo y que Dios te bendiga”, se despide Trump. Increíble.