Un caballo de batalla entre los prohibicionistas suele ser que legalizar o permitir el consumo de marihuana favorecerá que aumenten los jóvenes que se acerquen a la mandanga. Este estudio les quita la razón.

De hecho, si las personas que se obsesionan por la relación entre aumento en el consumo y legalización debería echarle un ojo a los jóvenes adultos porque ahí sí que creció de forma considerable.

Esta encuesta que publica el Washington Post revela que el consumo entre adolescentes entre 12 y 17 años se redujo a sus niveles hace dos décadas. Solo 6.5% de los adolescentes usaban marihuana. Contrasta claramente con el 20.8% de los jóvenes adultos que consumen cannabis, cifra que continúa en constante ascenso desde 1990.

¿Será que los más jóvenes ven a la marihuana como la droga de sus padres? ¿Perdió interés porque consumir algo legal deja de ser emocionante?