El presidente de Colombia, Iván Duque, dijo esta semana que tiene esperanzas en la creciente industria del cannabis medicinal en Colombia. En una entrevista con la agencia de noticias Associated Press, Duque patrocinó la producción colombiana de cannabis, que desde este verano se está exportando, pero renegó de los cultivos de hoja de coca y de la producción ilegal de cocaína, de la que dijo que contamina mucho.
La producción de cannabis medicinal es legal en Colombia desde 2016, pero ha sido este verano cuando se ha empezado a permitir la exportación de cogollos de la planta al extranjero. “No usamos cannabis con fines recreativos. Lo estamos usando con fines médicos”, dijo el presidente, que no apoya la regulación del cannabis de uso adulto.
Duque también se refirió a los cultivos de hoja de coca y cocaína, pero para declarar en contra de su regulación. “Para producir cocaína tienes una huella de carbono muy alta. Usas mucha gasolina, mucho cemento”, dijo. El debate sobre la regulación de la hoja de coca en Colombia ya se ha dado en el último año, y hay un proyecto de ley en el Senado para regular la producción, comercialización y consumo de la hoja de coca y de sus derivados, incluyendo la cocaína.
El proyecto superó el primer debate en una comisión del Senado el pasado abril y su objetivo es reducir los efectos sociales, sanitarios, ambientales y económicos que genera el narcotráfico y la prohibición de la hoja de coca y la cocaína. El borrador establece que el Estado sería el encargado de regular todo el proceso de producción y también incluye el uso comercial de la hoja de coca para la producción de alimentos, bebidas y cosméticos en Colombia, su uso ritual por parte de las comunidades indígenas del país, así como el uso recreativo de la cocaína en dosis limitadas.