El Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, aseguró que ningún estado ha cuestionado la regulación integral del cannabis en este país de América del Norte. Además, defendió el proceso de legalización y dijo que fue crucial para que Alemania pueda sancionar una normativa similar.
En una entrevista concedida al medio France.TV, Trudeau analizó el camino hacia la legalización del cannabis para adultos, que comenzó durante su primer mandato, y lo describió como una transición fácil con pocos cambios sociales significativos, aparte de una reducción de la presión sobre el sistema judicial.
“El único inconveniente que nos preocupaba mucho era que nos iba a dejar fuera de ciertos tratados internacionales sobre la lucha contra las drogas”, dijo Trudeau sobre la Convención Única de Estupefacientes de Naciones Unidas, en la que Canadá es un país firmante, y por lo general se utiliza como una barrera para que los países avancen en un proceso regulatorio de las drogas prohibidas. “Nos dijimos: ¿la gente va a castigar a Canadá porque no estamos alineados con los tratados? Nadie nos habló de eso. La gente miraba con interés lo que estábamos haciendo”, dijo luego el Primer Ministro.
“El otro ‘inconveniente’ es que todavía queda trabajo por hacer. Pero no hay nada que sea lo suficientemente negativo como para decir siquiera que no deberíamos haberlo hecho”, sostuvo Trudeau. De esta manera, el Primer Ministro canadiense no solo que ha defendido la regulación de su país. Sino que también se ha comprometido a continuar su proceso que, hasta el momento, solo le ha dado beneficios económicos al país y una mayor libertad a sus ciudadanos.