El Senado de Brasil comenzó a discutir ayer una Propuesta de Enmienda a la Constitución (PEC) que pretende despenalizar la tenencia de drogas para consumo personal. En caso de aprobarse, aquellas personas que tengan posesiones menores de cualquier estupefaciente dejarán de ir a la cárcel y tendrán acceso al tratamiento de adicciones, según dice el documento legislativo.
La PEC fue presentada por el senador Rodrigo Pacheco y ya obtuvo la aprobación del dictamen en la Comisión de Constitución y Justicia, lo que le da el paso para que la iniciativa se debata en la cámara alta brasileña. Pero a la propuesta le espera un largo camino: antes de ser votada en el pleno en primera vuelta, debe pasar por cinco sesiones de discusión y otras tres después de la votación en la segunda vuelta. Recién en ese momento puede pasar a la revisión en la Cámara de Diputados.
Esta PEC es una obligación parlamentaria que tienen que trabajar los senadores y diputados, tras la sentencia del Supremo Tribunal Federal que falló a favor de la inconstitucionalidad de penalizar la tenencia de drogas para uso personal. En este sentido, el máximo órgano judicial de Brasil ha votado 5 a 3 a favor de la despenalización de marihuana.
Entre algunas de las propuestas para la despenalización del uso de drogas, el documento incluye una diferenciación entre narcotraficante y consumidor, aunque todavía no se especificaron qué criterios se utilizarían para ello. Además, los usuarios de sustancias prohibidas tendrían “penas alternativas a la prisión y al tratamiento de adicciones”.