El consumo de fármacos indicados para el tratamiento de la ansiedad, la depresión, y los relajantes musculares, antipsicóticos y las pastillas para dormir aumentaron un 4,1% entre los meses de enero y septiembre de este año. Los llamados psicofármacos han sido más consumidos durante los meses de la covid, según la información publicada por IQVIA, una empresa de datos sanitarios.
Según la información recogida por El País, en estos nueve meses el tipo de psicofármacos que más han aumentado las ventas son los antipsicóticos, con un aumento del 4,8%, seguido de los tranquilizantes (4,2%), los antidepresivos (4,1%) y los hipnóticos y sedantes (3,2% de aumento).
Sin embargo, algunos expertos advierten que aún es pronto para establecer una relación de causalidad entre la covid y el aumento de psicofármacos. La catedrática de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid, María Paz García-Vega, afirmó que “por el momento no tenemos ningún estudio con la suficiente calidad para cuantificar este aumento de forma fiable y válida. Lo que sí tenemos son algunos indicadores de que los trastornos pueden haber aumentado”.
En un artículo publicado en la prestigiosa revista científica The Lancet se recopilan estudios sobre los efectos de la covid-19 en la salud mental hasta el momento, y se explica que la covid-19 ha generado un efecto de estrés psicológico sobre la población, que se concreta en cosas como la “alteración de la vida diaria, el miedo a la propia enfermedad o a sus efectos económicos”. El coordinador del estudio, el presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Celso Arango, explicó a El País que los efectos de la actual crisis de la covid son peores que la de la crisis económica del 2008 por el número de derivaciones psiquiátricas ocurridas.