A partir de ahora cuando la policía escocesa encuentre a una persona en posesión de una droga de Clase A podrá emitir una advertencia legal en lugar de iniciar un procedimiento judicial sobre la persona. Así lo anunció la semana pasada la Lord Advocate del país, Dorothy Bain, una alto cargo del Gobierno que se desempeña como jefe de los oficiales de Justicia de la Corona en Escocia. Las drogas clasificadas en la Clase A incluyen la heroína, la cocaína, el éxtasis y el LSD.
Dorothy Bain, que lleva en el cargo desde el pasado junio, ha propuesto la medida como una respuesta a la crisis de muertes por sobredosis que lleva años produciéndose en Escocia, y que el año pasado alcanzó la cifra récord de 1339 muertes. Bain explicó que la decisión de otorgar a la policía el poder de decidir sobre la aplicación o no de un acta por delito no equivale a una despenalización de estas drogas, y en una respuesta a los miembros del Parlamento Escocés dijo que para lidiar con la adicción a las drogas “una única medida no se ajusta a todos los casos”.
“La respuesta más apropiada, la respuesta más inteligente, en cualquier caso de drogas debe adaptarse a los hechos y circunstancias tanto del presunto delito como del delincuente”, dijo en la cámara legislativa. Según Bain la medida acerca al país a “un sistema de justicia penal que pueda tratar de manera más efectiva con el apoyo a las personas para que se alejen de la actividad delictiva”. Una medida así ya se aplica desde hace tiempo a las drogas de Clase B y C en el país.