Esta medida, que defienden los representantes Earl Blumenauer, Tom McClintock, Eleanor Holmes Norton y Barbara Lee tiene como fin impedir la intervención del gobierno federal en la implementación y aplicación de leyes que tengan que ver con la legalización de la marihuana por parte de un estado.

Lo que se pretende es “montar” esta ley sobre otra anterior de 2014 que protege contra el estado federal las leyes y su implementación cuando tenían que ver con la legalización de la marihuana medicinal.

En el texto que se pretende aprobar se puede leer que: “Ninguno de los fondos puestos a disposición por esta Ley para el Departamento de Justicia se puede utilizar, con respecto a cualquiera de los estados [aquí se enumeran todos los estados de la unión] para evitar que cualquiera de ellos implemente sus propias leyes que autorizan el uso, distribución, posesión o cultivo de marihuana… Ninguno de los fondos puestos a disposición por esta Ley al Departamento de Justicia se puede utilizar para evitar que cualquier tribu india (como dicho término se define en la sección 4 de la Ley de autodeterminación y asistencia a la educación india (25 USC 5304) promulgue o implemente leyes tribales que autorice el uso, distribución, posesión o cultivo de marihuana.”

Para justificar la presencia de esta nueva ley que se quiere aprobar se apela, de nuevo, a la justicia social.

"Más de dos tercios de los estadounidenses piensan que deberíamos poner fin a la política federal fallida de prohibición del cannabis", comenta el representante Earl Blumenauer. "Tenemos un proyecto de ley que haría exactamente eso, la Ley MORE, que espero esté en la Cámara y aborde el gran problema de la aplicación selectiva, que discrimina a los jóvenes estadounidenses negros de manera desproporcionada".

De aprobarse esta ley, algo sobre lo que tenemos serias dudas de que suceda, pondría fin a muchas de las amenazas de políticos como las de su presidente Donald Trump sobre la intervención en los asuntos estatales y en sus políticas sobre la marihuana.