A casi tres meses de haber entrado en vigor la regulación integral del cannabis en Alemania, el próximo lunes 1 de julio los clubes sociales podrán empezar a tener sus propios cultivos. Sin embargo, las asociaciones aseguran que ninguna sede del país ha empezado los trabajos de infraestructura y critican el sistema establecido por la legalización que los envuelve en laberintos burocráticos que les impide iniciar las plantaciones.
“No conozco ningún club que esté construyendo actualmente invernaderos y otros edificios”, dijo Jana Halbreiter, presidenta de la Asociación de Cannabis de Alemania (CAD), en diálogo con el medio RBB24. Si bien ya existen más de cien asociaciones en el país, ninguno de ellos podrá ofrecerles a sus miembros los derivados de la planta producidos de forma colectiva. Para Halbreiter, las razones de las demoras se encuentran en que los estados federales aún no han establecido los parámetros para otorgar las licencias de cultivo ni han designado a las autoridades responsables de hacerlo. “La autoridad tendrá tres meses para aprobar o rechazar la solicitud, lo que podría causar más retrasos si se utiliza el tiempo completo”, agregó la referente de la CAD.
“Personalmente tenía la esperanza de que pudiéramos solucionarlo”, dijo Torsten Dietrich, presidente del Cannabis Social Club Berlín, frente a las demoras en la designación de las autoridades que decidirán sobre sus planes de cultivo de cannabis para los socios. Él contó que pensaba entregar las primeras flores a fines de este año, pero “estamos pensando en arrancar los cultivos en octubre”. De esta manera, no habría cannabis hasta 2025.
Por último, las autoridades sanitarias de Alemania le han informado a la agencia de noticias DPA que están trabajando “intensamente” para crear el reglamento para expedir los permisos de cultivo a las asociaciones. Sin embargo, no han informado qué fecha prevén tener lista la normativa.