La medida fue anunciada por la División de Control del Cannabis (DCC, por sus siglas en inglés) y responde a una evaluación positiva del funcionamiento del mercado desde que se iniciaron las ventas para uso adulto en agosto de 2024. 

Hasta ahora, las personas no registradas como pacientes sólo podían adquirir una onza (aproximadamente 28 gramos) de cogollos al día. Con el nuevo límite de 2,5 onzas (alrededor de 70 gramos), el estado iguala el umbral de tenencia legal vigente.

El cambio no afecta a los usuarios con fines terapéuticos, quienes continúan autorizados a adquirir un suministro destinado para 90 días. Tampoco modifica los límites para otros productos de cannabis como concentrados, comestibles y vaporizadores que siguen regulados bajo un tope conjunto de 15.000 mg de THC por transacción.

La DCC destacó que la prioridad sigue siendo asegurar el abastecimiento adecuado para el sistema de cannabis medicinal. Para ello, cada dispensario que decida ampliar su límite de venta diaria debe presentar previamente una solicitud formal de "cambio de operaciones" y demostrar que puede garantizar inventario suficiente para pacientes.

Desde la apertura del mercado recreativo, las ventas en Ohio han superado los 400 millones de dólares. Sin embargo, el crecimiento del sector convive con tensiones legislativas: algunos representantes del Partido Republicano impulsan proyectos para reducir el número de plantas permitidas en el autocultivo, imponer límites más estrictos al THC y restringir nuevos formatos de productos. También se ha cuestionado la asignación de los ingresos fiscales, denunciándose un desvío de más de 10 millones de dólares que debieron ir a gobiernos locales.