La ciudad de San Francisco (EE UU) registró un notable incremento de las muertes por sobredosis el año pasado y batió un nuevo récord de cifras. Según la administración local entre el 1 de enero y el 31 de diciembre murieron 699 personas por sobredosis de drogas en la ciudad. La cifra triplica las muertes de personas contagiadas por covid-19 en la ciudad durante el 2020, que fueron 235.
El número de muertes por sobredosis registradas en 2019 fue de 441, por lo que las muertes del pasado año se han incrementado en un 58,5% respecto al año anterior. Según el diario San Francisco Chronicle, los expertos atribuyen una parte del aumento de las muertes por sobredosis a la creciente presencia de fentanilo, pero también culpan a los efectos que la pandemia ha tenido sobre los servicios de atención a personas con dependencia a drogas y los grupos de apoyo, que se han visto interrumpidos.
Las cifras podrían haber sido mucho mayores si no se hubieran administrado en miles de casos el fármaco Naloxona, un antagonista opioide que sirve como método de emergencia para detener sobredosis. Durante todo el año pasado el fármaco se utilizó al menos 3400 veces, y fue aplicado por diversidad de personas, desde trabajadores sanitarios hasta por usuarios de drogas. A esa cifra hay que sumarle otras 211 usos que hizo la policía de la ciudad.
En más del 70% de los casos de muerte por sobredosis se hallaron restos del opioide fentanilo en el organismo. Según los datos facilitados por la administración local la segunda droga que más veces se encontró en los casos de sobredosis fue la metanfetamina, seguida por la cocaína, después por la heroína y por último por fármacos opioides de prescripción médica.