El juzgado de instrucción nº 4 de Santander ha dictado el archivo de la causa iniciada contra un local perteneciente a una asociación en el que la policía irrumpió sin autorización el pasado febrero. Los agentes entraron en el local tras enterarse de que allí se vendía alcohol sin la licencia correspondiente y que se permitía el consumo de cannabis.
Los agentes acudieron al local tras recibir un aviso de los vecinos. Entraron sin una orden ni el permiso de los propietarios, y una vez dentro requirieron el permiso del local, pero este no se les entregó. Según ha publicado El Diario Montañés, el local tenía una licencia de carpintería. Los policías denunciaron al responsable del establecimiento por un delito contra la salud pública, que ahora el juez ha archivado porque los agentes entraron ilegalmente.
En el interior, los agentes encontraron algunos botes con cannabis y derivados. Pero la decisión del juez de declarar nula la entrada y el registro del local, ha provocado que ninguno de los efectos incautados puedan utilizarse para sostener la denuncia. En realidad, el local es parte de una asociación que estaba debidamente inscrita en el Registro de Asociaciones del Gobierno de Cantabria.
