La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, adelantó ayer que durante el primer trimestre del próximo año se promulgará una nueva ley para profundizar la guerra ya declarada contra la industria del cannabis. La iniciativa de la referente del Partido Popular (PP) buscaría darle un marco de mayor envergadura al I Plan Regional contra las Drogas de su gestión, el cual fue presentado este 2024.
Según el Ejecutivo regional, el proyecto de ley sobre drogas actualizaría la normativa que se encuentra vigente desde el año 2002. Entre alguno de sus puntos más importantes, se destinarían 200 millones de euros para intensificar las inspecciones a las tiendas de CBD que se encuentran en Madrid. Además, se crearían nuevos centros de salud para atender a las personas que se padecen trastornos mentales por adicciones a sustancias y se llevarían adelante talleres en escuelas y universidades para promover que los jóvenes se alejen del cannabis. Algunos de estos cursos ya han comenzado a funcionar en las últimas semanas.
En caso de que se apruebe el proyecto de ley, no se podrán realizar anuncios publicitarios de los productos de CBD en un radio de 300 metros alrededor de los centros educativos no universitarios y se limitarán los patrocinios de las compañías pertenecientes a la industria del cannabis. También se prohibirá la venta de los derivados de la planta a los menores de edad.
Desde la Comunidad de Madrid aseguraron que esta iniciativa busca “proteger a los menores de la venta en establecimientos y cuyo consumo tiene importantes riesgos para la salud”. A pesar de que la gestión de Ayuso sostiene que tiene la intención de preservar a los jóvenes, ya se ha demostrado que las políticas punitivistas solo han empeorado los problemas relacionados con el consumo de drogas. Incluso, en aquellos países en los que se reguló el cannabis, el consumo adolescente se ha disminuido.