La aprobación de las recomendaciones para regular el cannabis medicinal en España ha traído consigo varios titulares que afirman que el cannabis llegará a los pacientes en el periodo de seis meses. Pero lo más probable es que esto no ocurra así, o al menos no hay razones para afirmarlo, por ahora.
El texto aprobado por el Congreso indica que la Agencia Española del Medicamento será el pilar central de la regulación y el órgano encargado de su control y gestión administrativa. El texto establece un periodo de seis meses para que la AEMPS “realice los trabajos necesarios para que las citadas recomendaciones tengan encaje en la normativa y sean viables, permitiendo la disponibilidad en el mercado farmacéutico”.
Es decir, el periodo de seis meses que figura en el texto se refiere única y exclusivamente al tiempo que tiene la Agencia del Medicamento para desarrollar la legislación del cannabis medicinal. La elaboración legislativa no es lo mismo que la implementación de la ley, y sobre los plazos de la implementación por ahora no hay nada dicho.
Lo que podemos esperar cuando pasen los seis meses es que haya un texto legal (algún tipo de reglamento) que permita el acceso medicinal para los pacientes mediante una serie de mecanismos administrativos. Pero poner en marcha esos mecanismos —como pueden ser la elección de empresas proveedoras, la distribución de stocks o la formación del personal sanitario y el registro de pacientes— lleva tiempo, y sería una sorpresa difícil de imaginar que todo eso estuviese listo al mismo tiempo que el reglamento.