En las últimas tres décadas, España ha logrado alcanzar el mínimo histórico de consumo de tabaco. Así lo ha asegurado la Encuesta sobre alcohol y otras drogas 2024 (EDADES), publicada ayer. Según el estudio que realiza el Ministerio de Sanidad, el 36,8% de las personas consultadas aseguraron haber fumado durante el último año, lo que significa una cifra 2,2% menor a la obtenida en el 2022. Por otra parte, el alcohol continúa siendo la sustancia más consumida en el país.
A pesar del descenso de su uso, el tabaco sigue como la segunda sustancia más utilizada en España. El alcohol, que se mantiene en el primer lugar, ha sido consumido por el 76,5% de las personas que participaron de la encuesta. El inicio de la ingesta de las bebidas se ubica en los 16,6 años, una cifra estable durante los últimos cuatro años.
Si bien el consumo del tabaco se encuentra en pleno descenso, las autoridades sanitarias alertan que el uso de nicotina está aumentando en otras formas. Un ejemplo de ello son los cigarrillos electrónicos o vapes, que se ha duplicado en los últimos cuatro años. El 19% de los encuestados dijo que los ha probado alguna vez. Pero más de la mitad de los consumidores de estos productos utiliza variantes sin nicotina.
El cannabis continúa siendo la sustancia ilegal con mayor prevalencia en España. El 43,7% ha utilizado alguna vez los derivados de la planta, aunque el estudio no distingue entre consumo medicinal y recreativo. Si bien el consumo diario ha disminuido con respecto a 2022, se ha incrementado el consumo ocasional. Mientras un 12,6% de la población lo ha tomado en el último año (un 2% más que en 2022), un 10,5% lo realizó en el último mes (1,9% más que en 2022).