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Feijóo dice que la droga es peor que la covid y que los traficantes deben ser juzgados como asesinos

El presidente del PP compartió una amistad cercana de varios años con un importante contrabandista y traficante de cocaína gallego.

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, declaró ayer en Ecuador que las personas que usan drogas son enfermos, que la droga es una enfermedad peor que la covid y que los delitos de tráfico deberían castigarse con la misma intensidad que el asesinato. Feijóo, que en la década de los años 90 compartió una amistad cercana de varios años con un importante contrabandista y traficante de cocaína de Galicia, se dirigió a un auditorio universitario para condenar el uso y el tráfico de drogas en general y de cocaína en particular.

“El Covid comparado con la droga es una enfermedad banal. Porque la mayoría de ciudadanos que tengan la capacidad respiratoria van a superar el covid. Sin embargo, ningún ciudadano, por muy joven que sea, va a superar la cocaína. No lo va a superar nunca y va a ser un esclavo siempre”, dijo el presidente del PP en la Universidad de las Américas en Quito, para luego continuar diciendo que “de la misma forma que a alguien se le persigue por un asesinato, alguien debe ser perseguido con la misma intensidad por traficar con droga”.

Sus declaraciones fueron pronunciadas como respuesta a una pregunta del auditorio, concretamente del ex-alcalde de Quito, quien después de resumir cómo la política de la prohibición de las drogas ha resultado en un fracaso global que afectaba especialmente a los países productores de América Latina y pone en peligro a sus instituciones democráticas, preguntó a Feijóo qué pensaba que se podía hacer diferente para cambiar esas “circunstancias que son gravísimas” para países como Ecuador.

La respuesta de Feijóo no fue nada nuevo, sino que insistió en aplicar las mismas políticas punitivas que ya se han demostrado ineficientes, apoyándose en un discurso que estigmatiza a las personas usuarias de drogas, diciendo cosas como que las drogas “destrozan el cerebro, producen una ausencia de voluntad y destrozan a la persona”, y afirmando que una persona no puede consumir sin volverse adicta, algo que contrasta con los datos de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (UNODC por sus siglas en inglés), según los cuales solo entre el 11 y el 13% de los consumidores de drogas desarrolla un trastorno por consumo.

“El cáncer se puede curar si lo coges a tiempo. Un enfermo de cocaína no se puede curar. Al final va a recaer. Las posibilidades de curarse son mínimas. Por mucha voluntad que tenga, por mucho esfuerzo y por mucho dinero que tenga su familia para llevarle a un centro especializado, las posibilidades de no recaer, se lo puedo asegurar y si habla con personas que saben de esto se lo van a decir, es residual porcentualmente”, dijo Feijóo.

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