Un murciano recibe una multa de 10.401 por llevar algo menos de un porro de marihuana en el bolsillo.

Según relata El Diario, esta persona tiene que pagar esta increíble suma de dinero por llevar un porro debido a que es reincidente. No se trata ni de un narco ni de un camello, ojo. La conocida como Ley Mordaza castiga duramente la reincidencia en delitos relacionados con el cannabis, en concreto con 10.401 €

La denuncia de los agentes ha sido por “tenencia y consumo de estupefacientes” aunque esta persona niega haber estado consumiendo. La policía encontró en sus bolsillos un desbrozador que tenía restos de marihuana. La cantidad era de 0,01 gramo. Esto ha sido más que suficiente para que se le declare reincidente y le obliga a pagar 10.401€ de multa ya que la cantidad no importa. Hubiese sido igual si en lugar de esa cantidad hubiera sido de 4 gramos.

No es el único. Otro vecino tiene una multa de la misma cuantía por 1,48 gramos de cannabis, una cantidad que no supera los diez euros en la calle, algo a todas luces desproporcionado.

El bufete de abogados Brotsanbert denuncia que "los ciudadanos de esta localidad están sufriendo una imposición sistemática de sanciones por tenencia de cannabis". El municipio de 35.000 habitantes ha gestionado unas 50 sanciones por este mismo motivo. Por lo que recogen algunas informaciones, un portavoz del Ayuntamiento también cree que las multas son “una barbaridad” y que tienen “una actitud de diálogo” pero “es la ley y hay que aplicarla”.

El bufete de abogados se lamenta de que incluso el acusado se vea en la situación de no poder recurrir la multa puesto que "la ley llega a comprar el derecho a recurrir del administrado por 5.200 euros, algo que consideramos inconstitucional. Además, la administración suele confirmar las sanciones, por lo que para conseguir anularlas hace falta acudir a un juzgado, con el consiguiente gasto, que en el caso de estas sanciones puede rondar los 3.500 euros".

Según El Diario, esta persona dedica un 40% de sus sueldo a pagar la multa. Además de sentirse presa de una persecución, para cuando los políticos muevan ficha y retiren estas sanciones lo más probable es que él ya haya pagado la multa. “Se te quitan las ganas de trabajar”, comenta el sancionado.