Hay dos proyectos de despenalización del uso de cannabis para la ciudad de Nueva York, ambos del 2017: el proyecto de ley 3040 C en el Senado del estado, presentado por la senadora Liz Krueger, y el proyecto A3506C en la Asamblea estatal, institución que controla el desarrollo legislativo; y en ambas cámaras tienen mayoría los representantes del partido demócrata, que se muestran a favor de regular el uso recreativo.
También el gobernador, Andrew Cuomo, quien en agosto nombró un grupo de expertos para diseñar un borrador legislativo sobre uso de la marihuana recreativa, ha asegurado en diciembre que su administración apoya un plan para regular el consumo entre adultos, aunque en el pasado se haya mostrado bastante poco permeable a la idea.
Juan Cartagena, director de la organización Latino Justice, que ha abogado por la legalización de la marihuana como un asunto de justicia, afirmó recientemente: “Tenemos una urgencia bien importante de que se apruebe esa ley, porque cada día que se demora esa nueva legislación, es un día más que nuestras comunidades sufren lo peor del sistema actual con la prohibición”.
Catalina Cruz (en la foto), primera dreamer (menores que llegan y viven en los EE UU de manera ilegal) en formar parte de la Asamblea neoyorkina y que es considerada la representante de la inmigración, también ha hablado sobre ello: “Nuestras comunidades se han visto muy afectadas por esta penalización del consumo y por ejemplos de otros estados donde se ha despenalizado no se ha visto que se vaya a desencadenar una perdición como algunos temen”, dijo.