La promesa de regulación para Luxemburgo podría no desembocar en lo que se planteó en un inicio. El Gobierno tripartito del país se comprometió a regular el uso adulto de cannabis, el autocultivo personal y las ventas de cannabis como parte de su acuerdo de coalición, pero ahora los planes podrían estar cambiando y la legalización de las ventas podría quedar fuera, según la información recopilada por la radio pública 100.7.
El compromiso con la regulación se remonta al pacto de coalición de las elecciones del 2018. Los planes de regulación del cultivo y venta de cannabis fueron confirmados en más de una ocasión tras las elecciones pero luego todo quedó paralizado por culpa de la pandemia de covid. Después de un año sin hablar del tema, el pasado mayo la ministra de Salud confirmó que el proyecto se seguía trabajando y que “se había avanzado mucho desde el 2019” en la propuesta.
Según la información de la radio pública, que ha emitido casi todas las noticias sobre el proyecto en primicia, este verano los tres partidos de la coalición acordaron tomar un camino diferente para la regulación. La ministra de Salud, Paulette Lenert, dijo este martes en una entrevista con la radio que el Gobierno está buscando alternativas al concepto original de regulación. Según esta, uno de los principales obstáculos legales para la regulación sería el marco europeo y las reticencias de los países vecinos, que temen que incremente el narcotráfico en su territorio. El resto de ministros no han querido dar detalles.