“Un hombre intentó burlar un control en Mendoza, llevando más de dos kilos de cocaína ocultos en envases de talco dentro de un micro (ómnibus) de larga distancia. Pero la Gendarmería lo descubrió rápidamente gracias a su nerviosismo y actitud sospechosa ¡La seguridad de nuestro país va un paso delante de los delincuentes! Las hace, las paga”, publicó la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, en su cuenta de Twitter. El hecho sucedió a principios del mes pasado y la persona acusada estuvo 21 días preso, hasta que fue liberado porque se comprobó que las pruebas de reactivos habían fallado.
La persona acusada se trata de Ariel Acosta, un hombre de 42 años oriundo de la ciudad costera de Mar del Plata y que había viajado a la provincia de Mendoza para realizar un tratamiento de desintoxicación por su consumo problemático de alcohol. En diálogo con el programa radial Pasaron Cosas, conducido por Alejandro Bercovich, Acosta contó que él es vendedor ambulante y había comprado los talcos para comercializarlos en la vía pública mendocina. Pero como no lo logró, el hombre decidió llevarse los 18 potes a su hogar. Cuando estaba esperando su ómnibus, la Gendarmería Nacional lo interceptó por una supuesta actitud sospechosa y le descubrió los envases. A las fuerzas de seguridad les resultó raro que Acosta tuviera tantos envases de talco y allí mismo realizaron el testeo de reactivos de cocaína, el cual dio tibiamente positivo.
“La prueba salió más o menos celeste, hicieron veinte pruebas atrás y no volvió a salir color azul. Las que salieron mal las tiraron todas a la basura y se quedaron con la que salió más o menos azul. Entonces me metieron en un penal, donde a los porteños no los quieren. Yo no soy porteño, pero para ellos es todo igual”, contó Acosta durante la entrevista sobre los 21 días que estuvo preso en una unidad penitenciaria federal. Después del tiempo transcurrido, Acosta fue liberado porque se comprobó que el reactivo había fallado y que no trasladaba cocaína, sino talco.
“Hicieron todo mal y nadie me pidió perdón por lo que tuve que pasar. Cómo no se van a dar cuenta de que no era cocaína”, dijo Acosta. Hasta el momento, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, tampoco se rectificó sobre su festejo de haber detenido a un “poderoso narcotraficante”.
“EL TALCO SIEMPRE SE CONFUNDE CON COCAÍNA”
(La impunidad de una ministra impresentable)
La jornada del jueves, con la Gendarmería al frente de un operativo antidrogas, fue un día de papelón para Patricia Bullrich. pic.twitter.com/G55wJ6EcWp— Revista Sudestada (@RevSudestada) November 2, 2024