La Marina de los EEUU introdujo un sustancial cambio en su política de reclutamiento. A partir de ahora, los jóvenes que se sumen a este cuerpo militar y que den un resultado positivo de consumo de cannabis serán aceptados en la fuerza. Esta política significa un cambio total frente al anterior enfoque de tolerancia cero.
“Si no superan la prueba y confiesan ‘Sí, fumo marihuana’, hacemos una evaluación del joven para asegurarnos de que no haya nada más”, aseguró el contralmirante James Waters, director de la división de planes y política de personal militar de la Marina. “Pero confiamos en que a través del proceso de entrenamiento tengamos la oportunidad de acercarlos a nuestra cultural”, dijo luego en referencia a que no están dispuestos a abandonar la doctrina purista.
Aunque Waters aseguró que la medida es un esfuerzo de adaptación a las nuevas normas sociales en reconocimiento a la tendencia creciente del uso de cannabis en la población. Pero también es cierto que la Marina pretende así reducir la tasa de abandono en el entrenamiento que actualmente ronda el 10%, una de las más altas en la historia. “Si vamos a reclutar a 40 mil marineros, perder cuatro mil reclutas en el proceso de entrenamiento es realmente inútil y por eso queremos tratar de seguir trabajando eso”, dijo Waters.
Por último, el contralmirante aseguró que no hay debates dentro de las fuerzas para ofrecer indultos similares a otras sustancias. “En el ejército no consumimos drogas”, sentenció.