El comandante del Servicio Nacional de Zambia (ZNS), el teniente general Maliti Solochi, anunció hace unas semanas que está consiguiendo numerosas hectáreas para iniciar cultivos de cannabis en el país. Según el comandante, varios líderes tradicionales han aceptado ceder sus tierras para establecer plantaciones de cannabis, y se espera que se pongan en marcha a partir de este mes.
En Zambia el uso de cannabis psicoactivo sigue siendo ilegal, pero el año pasado se reguló la producción de cannabis para fines medicinales, industriales y científicos, que únicamente se podrá utilizar para su exportación. El proyecto de regulación del cannabis está enfocado a la recuperación económica del país y el Gobierno espera que se creen más de 3000 puestos de trabajo dentro de la futura industria.
Por ahora el ZNS ha conseguido 20.000 hectáreas en distintas provincias para empezar con los cultivos, siendo este el único actor con permiso para empezar a cultivar cannabis, según expresó el comandante en una rueda de prensa reciente. “ZNS es la única institución que tiene la tarea de cultivar cannabis. Estamos buscando plantaciones y para ello enviamos un SOS a los jefes [tradicionales], y encontramos que al menos algunos de ellos han aceptado que estemos allí”, dijo el comandante según recoge Diggers.
Zambia no es el único país de la región que está dejando los cultivos de cannabis en manos de los militares. En Zimbabue, donde la producción de cannabis medicinal se reguló en 2018, también lo está haciendo igual. “Zambia ve el cannabis como un cultivo de seguridad, de ahí la decisión de los militares de adelantarse a la legalización para apoderarse de tierras de cannabis”, dijo Deogracias Kalima, editor en la revista Unsustainable y en la Organización de la ONU para la Agricultura. En el caso de Zambia, el ZNS es una rama de las Fuerzas de Defensa de Zambia especializada en capacitación agrícola y ganadera.