Los conductores de taxis de la ciudad de Nueva York, y otros servicios como Uber, no serán sometidos a pruebas de consumo de cannabis a partir de ahora. Lo anunció la semana pasada la Comisión de Taxis y Limusinas (TLC) de la ciudad, que ha tomado la medida tras la entrada en vigor de la nueva ley del estado de Nueva York, que reguló las ventas y el uso de cannabis para personas adultas. La falta de precisión de los tests de cannabis es uno de los argumentos para esta nueva política.
“Debido al cambio en la ley, en el futuro la TLC ya no hará pruebas de marihuana en las pruebas anuales de drogas requeridas”, dijo la comisión reguladora de taxis en un comunicado enviado a los conductores con una licencia, que ha sido reproducida por The Post. La agencia dijo que el resto de pruebas de drogas seguirán vigentes y que la ausencia de tests de uso de cannabis no significa que esté permitida la conducción bajo sus efectos: “Si bien el uso de marihuana ahora es legal para los adultos, la ley indica que los conductores con licencia de TLC deben estar sobrios cuando operan un vehículo”.
El fundador y portavoz de la Federación de Taxistas del Estado de Nueva York, Fernando Mateo, consideró que la decisión era “irresponsable” y un "gran error”, en declaraciones para The Post. “Si no van a realizar pruebas de marihuana, eso significa que los conductores tendrán la oportunidad de fumar marihuana y conducir. No quiero que mis hijos estén en un automóvil con un tipo que fuma marihuana y que puede fumar marihuana con regularidad y que no se haga la prueba. Tenemos que trazar la línea en alguna parte”, declaró.