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¿Pueden cambiar tu opinión política los hongos psicodélicos?

¿Ayer votaste a Podemos y hoy quieres meter el sobre en el PP? ¿Te comiste una setita mágica y crees que tiene la culpa? Veamos.

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La psilocibina es el componente psicoactivo de los hongos mágicos. Desde hace años se lleva estudiando el potencial de este compuesto para tratar problemas psicológicos. Lo que hasta el momento se pensaba que podría ser un detonante de enfermedades mentales resulta que, ironía, está dando resultados positivos como tratamiento en casos como el de la depresión: tenemos informes sobre cómo el cerebro “resetea” tras el tratamiento.

Más extraño es otro informe, más o menos reciente, que asegura que la psilocibina puede modificar las opiniones políticas. O al menos mientras estás deprimido.

El estudio se centró en 7 pacientes que estaban tratándose la depresión con psilocibina (unos 10 a 25 mg por semana). Por vez primera un estudio dio claras muestras de que este componente es capaz de ayudar como tratamiento de este desorden.

El director del Psychedelic Research Group, Dr. Robin Carhart-Harris, dice que: “Hemos demostrado por vez primera que se dan cambios evidentes en la actividad cerebral de las personas deprimidas que se tratan con psilobicina después de que no se logre mediante tratamientos convencionales”.

En cuanto a las opiniones políticas aquí viene lo interesante: se les preguntó a los pacientes que se colocaran en una horquilla de posiciones políticas que iban desde liberal hasta autoritario. Se entiende que la pregunta de “dónde te colocas” era más sutil porque la gente no suele llamarse “autoritaria” a sí misma. Digamos que pedía a la gente que se colocara entre la izquierda liberal y la derecha muy conservadora. Ya sabéis que en los EE.UU. que a poco que defiendas políticas sociales ya eres un comunista, por lo que el espectro es reducido.

Después de situar a los pacientes se les lanzó una aseveración del tipo “la pena de muerte es la mejor solución para algunos crímenes”. Tras el tratamiento la mayor parte de los pacientes comenzaron a cambiar de opinión y a situarse en opiniones que se suelen identificar con los liberales, como que la pena de muerte no es la solución.

¿Así que la paz y el amor de los hippies no era una reacción contra las políticas autoritarias si no una reacción química de los hongos mágicos? Seguiremos informando.

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