Según su experiencia personal, los usuarios de Dimetiltriptamina (DMT) tienen más encuentros con “entidades espirituales” durante sus experiencias psiconauticas. Ojo, que se viene la New age.
El DMT se ha relacionado siempre con los viajes “espirituales”. De entre todas la moléculas psicodélicas, las del DMT son las que han propiciado más y mejores viajes de descubrimiento espiritual. ¿Serán los espíritus que se presentan o será la potente capacidad alucinógena del DMT? ¿Mucho tripi o hay alguna relación entre el DMT y las apariciones espirituales de elfos o entidades de luz? Un artículo en Journal of Psychopharmacology trata poner algo de orden en todo esto.
El estudio que se publica en el mencionado artículo fue realizado por el Centro para los estudios psicodélicos de la John Hopkins, famoso lugar en estos momentos por ser un punto de referencia en el estudio y la monitorización del desarrollo del Covid-19 (el centro John Hopkins, no el centro para la psicodelía, claro). Más de 10.000 sujetos fueron reclutados a través de anuncios por Internet entre febrero y diciembre de 2018. Después de descartar individuos que no cumplían con los criterios para el estudio, incluidos aquellos con trastornos psiquiátricos diagnosticados, los investigadores llegaron a un grupo de 2.561 sujetos.
En la prueba se les preguntó a estas personas que describiesen lo mejor posible su encuentro más memorable con una entidad después de fumar o vaporizar DMT. Además de describir la experiencia, se pidió a los sujetos que completaran una encuesta para evaluar experiencias religiosas o cercanas a la muerte. Estas preguntas pidieron a los participantes que describieran la entidad que encontraron y si la experiencia cambió el curso de sus vidas.
Los resultados entran dentro de lo que se esperaba: El 99% dijo que el encuentro con la entidad tuvo una respuesta emocional y el 58% que esa entidad respondió emocionalmente al encuentro. Casi dos tercios de los sujetos dijeron que el encuentro parecía más real que la vida cotidiana, y el 80% dijo que podían comunicarse con la entidad.
Resulta curioso que la mayor parte de las descripciones coincidan con las que hacen las personas que aseguran haber sido abducidas por un OVNI. La entidad, en el caso de los OVNI o en el del DMT, sigue siendo descrita con términos vagos como “ser”, “espíritu”, “guía”, “alien”, etc. En ambos casos también se sugiere que la comunicación se produce por telepatía.
Para la mayoría de los participantes, estas experiencias fueron positivas e incluso aseguran que les cambiaron la vida. Poco más de la mitad de todos los encuestados dijeron que su encuentro fue uno de los cinco momentos más significativos, espiritualmente significativos y psicológicamente profundos de toda su vida. El 69% de los sujetos dijeron que las entidades les dieron un mensaje, una tarea o una visión única, y el 20% dijo que la entidad les dio una predicción del futuro.
Algunos aseguraron que la experiencia les cambió en cuanto a las creencias en otros planos de la realidad. Del 55% que se consideraba ateo antes de tomar DMT solo el 26% permaneció siendo ateo tras el viaje. ¿Debería utilizar la Iglesia católica DMT para volver a traer a los fieles al redil?
Si damos crédito al estudio, el DMT sigue siendo la droga espiritual por definición. Así que si queréis tener una experiencia religiosa, parece que lo mejor sigue siendo lo tradicional.