El Parlamento de Navarra ha aprobado con 33 votos a favor y 17 en contra una proposición de Ley Foral reguladora de usuarios de cannabis, una iniciativa legislativa que será defendida ante el Congreso de los Diputados.
La iniciativa, impulsada por PSN-PSOE, GeroaBai, EH Bildu, IU y Podemos, será la primera proposición de ley registrada en el Congreso que busca la regulación del consumo y autocultivo, con el objetivo de “evitar la inseguridad derivada de la ausencia de un marco normativo claro y coherente a nivel estatal”. Por parte del mayoritario UPN Carlos García Adanero subrayó que “el cannabis no es inocuo”, y Javier García (PPN) llegó a afirmar que la legalización de esta sustancia generará “confusión sobre determinadas conductas” y “un flaco favor a la sociedad, especialmente a los jóvenes”. Sin embargo, en las posiciones favorables a la nueva legislación el discurso del miedo no hace mella. Patxi Leuza, de Geroa Bai, concretó que la idea no es la legalización plena sino implementar “herramientas para establecer un control adecuado” y “luchar contra las mafias que lo copan”. Podemos, sin embargo, en voz de Mikel Buil, afirmó que su partido “va más allá y defiende la legalización para generar una estructura positiva”. Desde la plataforma RCN-NOK, que lleva desde el 2006 batiéndose el cobre para alcanzar este resultado, su presidente, Ramón Morcillo, declaró: “Es una irresponsabilidad hablar de sustancias y peligros para la salud y no querer sentarse a dialogar para buscar soluciones al consumo de cannabis”, refiriéndose a los argumentos contrarios que han esgrimido UPN y PP. “Queremos defender la salud pública haciendo que se controle y analice el cannabis desde su siembra hasta su consumo y así reduzcamos riesgos, igual que cualquier otro producto de consumo. Ni es la legalización total ni habrá barra libre, solo regulamos lo que ya es legal y abrimos el debate de una regulación integral en la sede del Congreso, allí donde se promulgan las leyes”.