Pasar al contenido principal

España gasta 300.000 euros anuales en destruir drogas

Las drogas son llevadas a dos plantas privadas de Asturias y Toledo, que realizan la labor pese a no resultarles rentable.

El Ministerio del Interior español gasta 300.000 euros cada año en destruir las drogas decomisadas en las operaciones policiales. Las sustancias intervenidas son llevadas a dos plantas con capacidad para hacer este trabajo, una en Asturias y otra en Toledo, que realizan la labor pese a no resultarles rentable. De este modo, la destrucción se realiza mediante concesiones, ya que el Estado no cuenta con instalaciones propias capaces de hacer frente a esta labor, y tampoco piensa en construirlas a corto plazo.

Esta información se compartió en la Mesa de coordinación de adjudicaciones del Fondo de bienes decomisados por tráfico de drogas, celebrada en marzo, a cuyas actas ha tenido acceso El Independiente. Según este diario, durante la reunión, el Delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Joan Ramón Villalbí, preguntó por los planes de construcción de una planta de destrucción de drogas.

El director del Centro de Inteligencia Contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), el departamento encargado de gestionar el fondo de bienes decomisados, afirmó que la construcción de una planta así tendría un coste aproximado de entre dos y tres millones de euros, y que el proyecto necesitaría entre cuatro y seis años para realizarse, afirmando que tiene una “difícil solución a corto plazo”.

Con lo que sí cuenta el ministerio es con varias máquinas trituradoras de material vegetal para destruir las plantas de marihuana incautadas, al menos para una porción de las que se decomisan. A día de hoy el ministerio cuenta con 42 máquinas. Las siete primeras se compraron en el año 2017, en 2019 se compraron otras 15 y a finales de 2020 adquirió 20 más. Aún así no se alcanza para cubrir las necesidades, pues la cantidad de plantas incautadas no para de crecer año tras año. En 2021 el número de plantas incautadas fue de 3 millones, una cifra que batió los récords, cuadruplicando las anteriores cifras. Por eso, el ministerio abrió una convocatoria este año para buscar empresas que apoyen la destrucción de plantaciones que alcancen las 100.000 plantas.

Te puede interesar...

¿Te ha gustado este artículo y quieres saber más?
Aquí te dejamos una cata selecta de nuestros mejores contenidos relacionados:

Suscríbete a Cáñamo