Desde los territorios hispanoamericanos no han dejado de llegar nuevas relacionadas con el cannabis y la regulación de sus distintos usos durante el último año. Repasamos algunas de las más importantes que han ocurrido en ocho países de la región.
MÉXICO
En este tiempo ha habido un gran ausente dentro de los países hispanohablantes que han hecho avances del cannabis, un país que fue protagonista en los años anteriores. México, en donde los legisladores tienen pendiente una regulación del cannabis obligada por la Corte Suprema del país, no ha dado ningún paso en esta dirección, y los congresistas siguen eludiendo su deber. A pesar de esto, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) está obligada a otorgar permisos para el consumo lúdico de cannabis y en enero ya había 4000 personas que habían conseguido la autorización de la administración para consumir cannabis legalmente.
COLOMBIA
Hace justo un año los legisladores colombianos aprobaron dos proyectos de ley para regular el uso adulto de cannabis. Las propuestas acabaron fusionándose en un único proyecto que a lo largo del año superó todos los trámites necesarios para convertirse en ley, a excepción de la última votación en la plenaria del Senado. Se trata del proyecto de ley para regular el cannabis que más lejos ha llegado en la historia del país, logrando superar siete de los ocho debates necesarios para convertirse en ley. La medida incluía la modificación del artículo de la Constitución que prohíbe la tenencia y el consumo de drogas, así como una regulación de la compra, la venta, la distribución y comercialización del cannabis recreativo.
Aparte de esto, este año el Ministerio de Salud de Colombia incluyó los fármacos de cannabis medicinal a base de plantas dentro del sistema de cobertura médica obligatoria, y desde el pasado enero todos los proveedores de seguros médicos deben cubrir los costos de las recetas médicas de cannabis para los pacientes. En febrero el Gobierno también autorizó a cuatro grandes empresas de alimentación el registro de los primeros alimentos que contienen cannabis como parte de su preparación: atún en aceite, pan, zumo y una bebida energética; todos ellos ricos en cbd o infusionados con partes de la planta del cannabis.
Todo esto ha ocurrido bajo el primer año de mandato del presidente Gustavo Prieto, quien durante todo este tiempo se ha manifestado en varias ocasiones a favor de acabar con la prohibición de las drogas, abogando especialmente por regular el cannabis, la hoja de coca y su principal alcaloide, la cocaína.
CHILE
En Chile los legisladores aprobaron ese año una ley conocida como Ley Anti-Narcos que, además de regular distintos aspectos relacionados con las drogas y el narcotráfico, incluye una medida de protección para los pacientes del cannabis medicinal. La ley reconoce explícitamente el derecho a autocultivar cannabis medicinal para las personas que cuenten con una receta médica. Aunque la ley chilena ya recogía anteriormente el derecho al uso personal y medicinal del cannabis, esto no se estaba cumpliendo, y a menudo la policía invadía las casas de los pacientes que cultivaban para requisarles sus plantas. Luego los pacientes solían ser absueltos durante el juicio, pero esto no evitaba la destrucción de sus plantas y el calvario de ser intervenidos, tratados como delincuentes y tener que enfrentar un procedimiento judicial.
Sobre el cannabis de uso recreativo, la directora del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas, Natalia Riffo, dijo en diciembre del año pasado que se estudiaría la regulación como parte del programa de drogas, pero desde entonces no ha habido noticias.
ARGENTINA
Argentina ha seguido con su proceso de implementación de la ley aprobada el año pasado para desarrollar una industria nacional del cáñamo industrial y el cannabis medicinal. Así, el pasado octubre la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología autorizó a la empresa Cannava, una empresa pública propiedad del estado provincial de Jujuy. Tres meses después el Gobierno creó la esperada Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y el Cannabis Medicinal (ARICCAME), el organismo que se encargará de la gestión administrativa de la nueva industria.
URUGUAY
Uruguay, el primer país del mundo en legalizar el cannabis tras la prohibición internacional, batió sus récords de ventas de cannabis a finales del año pasado coincidiendo con el lanzamiento de una nueva y esperada variedad de cannabis, más potente que las que había disponibles hasta entonces. La nueva variedad, llamada Gamma, contiene un porcentaje de THC de hasta el 15%, mientras que las otras dos variedades disponibles hasta ese momento, las llamadas Alfa y Beta, tienen una concentración de THC de hasta el 9%. El director del Instituto de Regulación del Cannabis, Juan Ignacio Tastás, dijo que previsiblemente se lanzará una cuarta variedad de cannabis con unos niveles de THC de hasta el 16% en diciembre de este año.
Pero no han sido todo buenas noticias en el país. Activistas y defensores de los derechos humanos han alzado la voz este año para denunciar que en el país hay cada vez más personas encarceladas por cannabis y otras drogas, y señalan a una ley aprobada en 2020 que recrudeció las penas por delitos relacionados con drogas y que está llevando a muchas personas a la cárcel, sobre todo a mujeres. También la Asociación de Grow Shops y Comercios Afines compareció ante el Parlamento para explicar cómo las leyes siguen llevando a autocultivadores a la cárcel por tener unas pocas plantas de más, o a personas usuarias por revender unos pocos gramos a personas cercanas.
PERÚ
El Ministerio de Salud de Perú publicó a finales de febrero el esperado reglamento del cannabis medicinal que establece las formas de acceso a los preparados y derivados medicinales de la planta y las formas de producción reguladas. El reglamento establece que los pacientes podrán acceder a los tratamientos siempre que cuenten con una receta médica y se inscriban en el Registro Nacional de Pacientes Usuarios del Cannabis. El reglamento también determina las medidas de seguridad sanitaria y define los cuatro tipos de licencia: una para investigación científica, otra de producción en entidades públicas o laboratorios farmacéuticos; otra para importación y comercialización y una última para producción artesanal, para que las asociaciones de pacientes puedan producir su propio cannabis medicinal.
BOLIVIA
Bolivia está preparando su propia regulación del cannabis medicinal de la mano de la congresista Andrea Barrientos, quien anunció a finales de junio que presentará un proyecto de ley para la regulación. El uso de cannabis con fines medicinales está autorizado en el país únicamente en casos excepcionales y por un lapso de tres meses, y la intención principal del proyecto es despenalizar el uso medicinal del cannabis y sacarlo de la lista de sustancias prohibidas. Tanto los legisladores del Gobierno como los de la oposición están dispuestos a debatir el proyecto.
Aparte del cannabis, hay que mencionar que el vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca, anunció en la 66ª Comisión de Estupefacientes de la ONU celebrada en marzo que su país iniciará un procedimiento para acabar con la prohibición internacional de la hoja de coca. El dirigente recordó que la planta tiene varios usos tradiciones en su país y en otros países de la región andina y dijo que su país iniciará el procedimiento formal para solicitar una revisión a la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre las propiedades de la hoja de coca. La intención es que la OMS reconozca que el uso de la hoja de coca no supone un riesgo para la salud y que el informe sirva para recomendar su reclasificación en las listas de drogas prohibidas internacionalmente.
COSTA RICA
Costa Rica también está inmersa en un proceso para regular el cannabis de uso adulto, un proyecto que fue anunciado hace un año por el presidente Rodrigo Chaves. El primer borrador del proyecto incluyó dos formas de acceso al cannabis independientes del circuito comercial de ventas, incluyendo el autocultivo doméstico y los cultivos colectivos en clubs. Además de esto, la intención es regular el consumo, el cultivo, producción y comercialización del cannabis. Pero por ahora el proyecto no tiene el futuro asegurado y el Gobierno está modificando la propuesta original para lograr un consenso y lograr su aprobación. Mientras tanto sigue la implementación de la regulación del cannabis medicinal y el pasado mayo se aprobó la primera licencia para una empresa productora.